Josué 1:9 Mira que te mando que te esfuerces y seas
valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en
dondequiera que vayas.
En el capitulo primero de Josué, vemos que el Señor le recuerda por tres veces que se esfuerce y sea valiente, ello desde el punto objetivo es normal ya que Josué acaba de heredar la muy difícil tarea de liderar un numeroso pueblo y completar así la empresa que comenzó Moisés, de introducir a todo el pueblo de Israel en la tierra prometida.
Como todo hombre mortal estaría enfrentándose a sus temores ante el gran reto que tenía por delante, por ello Dios le recuerda por tres veces que él solo tenía que esforzarse y ser muy valiente porque Jehová el Señor iba a estar con él y no estaría solo.
Si te encuentres pasando por una mala situación: soledad, enfermedad, angustia, depresión o algo semejante y ya no sabes que hacer ni cómo salir de esta situación, yo quiero animarte, no con palabras sino con revelación de la palabra de Dios para ti Hoy. El Señor Jesucristo quiere que te des cuenta de todo lo que él sufrió la noche en que iba a ser entregado y lo solo que se sentía en Getsemaní, la depresión que tuvo en ese crucial momento por todo que se le venía encima era tan fuerte que estoy seguro que nosotros no lo habríamos aguantado, si nos hubieran puesto en su lugar, pero Él fue fiel y lucho hasta el final, por eso se atreve a pedirnos que nos esforcemos por salir adelante en la situación que atravesamos en estos y en cualquier momento de nuestra vida.
Romanos 8:35-39
¿Quién nos separará del amor de Cristo?
¿Tribulación, o angustia, o persecución, o hambre,
o desnudez, o peligro, o espada? Como está escrito: Por causa de ti somos muertos todo el tiempo; Somos contados como ovejas de matadero. Antes,
en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó. Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida,
ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar
del amor de Dios, que es en Cristo Jesús
Señor nuestro.
Escudriña la palabra de Dios, ora y ponte de
acuerdo con el Espíritu Santo y pídele ayuda para la correcta interpretación de
la escritura que vas a leer y te aseguro que Él te inspirará y te llevara a la
revelación de la misma y a la solución del asunto por el cual tú acudiste a Él.
Rebélate a tu actual situación, no te acomodes a estar deprimido, enfermo, solo o necesitado. Cambia tu pensamiento a una situación de alegría y de completa sanidad, acude a una Iglesia y comparte con los demás.
Lucha, la victoria es tuya, así que esfuérzate y se valiente porque el Señor tu Dios está contigo y Él te dará la victoria. Amén
Fuente: Tabernáculo de la Gracia
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